La división al interior del Cártel del Golfo abre la posibilidad de que Los Zetas y el Cártel de Sinaloa busquen ganar territorio en el Noreste
José Díaz Briseño / Corresponsal el norte
Washington DC, Estados Unidos (25 octubre 2011).- El Cártel del Golfo vive un "cisma" entre dos facciones enfrentadas que amenaza con hacerlo explotar, lo que abriría la puerta a que Los Zetas y el Cártel de Sinaloa ganen más poder en el Noreste, y que aumentaría la violencia en la región, afirmó hoy la firma de seguridad Stratfor.
Según la actualización de su Reporte de Cárteles 2011 publicada hoy, Stratfor asegura que el Cártel del Golfo pasa por una erupción de violencia en su interior derivada de la pelea entre "Los Metros", liderados por Jorge Eduardo "El Coss" Costilla, y "Los Rojos", aún fieles a la familia Cárdenas Guillén.
"Aunque (el Cártel) del Golfo sigue siendo una sola entidad, nosotros anticipamos que, ausente una gran reconciliación entre 'Los Metros' y 'Los Rojos', el Cártel puede romperse violentamente en los próximos 3 a 8 meses", dice la actualización hecha por la firma consultora con sede en Austin, Texas.
"A pesar que la división (del Cártel) del Golfo ha creciendo por dos años, la aparente erupción de violencia enfocada hacia al interior en el último trimestre indica que la división pueda estar a punto de explotar".
El descubrimiento el 3 de septiembre pasado del cuerpo de Samuel "El Metro 3" Borrego Flores (jefe del Cártel del Golfo para la plaza de Reynosa y el principal lugarteniente de "El Coss") puede ser atribuido directamente a la disputa interna con "Los Rojos", señala Stratfor.
También, la consultora estadounidense afirma que el hallazgo del cuerpo de César "El Gama" Dávila García el 11 de octubre pasado en Reynosa (quien fue jefe financiero del Cártel y jefe de la plaza de Tampico) está llena de dudas, pero también podría atribuirse a la pelea entre "Metros" y "Rojos".
Según Stratfor, la división al interior del Cártel del Golfo surge tras la muerte en noviembre de 2010 de Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, alias "Tony Tormenta" (hermano del antiguo jefe del Cártel Osiel Cárdenas Guillén) cuando su sobrino Rafael "El Junior" Cárdenas busca hacerse del control.
"La división que estamos viendo dentro del Cártel del Golfo comenzó en su mayor parte con la muerte de Antonio (Ezequiel) Cárdenas Guillén. En ese momento, se cree que Rafael 'El Junior' Cárdenas, sobrino de Osiel y de Antonio (Ezequiel) Cárdenas Guillén esperaba reemplazar a sus tíos como líder del Cártel del Golfo", asegura el reporte de la firma especializada en inteligencia.
"Sin embargo, Costilla Sánchez ('El Coss') asumió el control completo de la organización. El cisma se hizo más amplio cuando se formaron dos facciones: Los Metros, que eran leales a Costilla Sánchez, y los Rojos, que eran leales a la familia Cárdenas", agrega el reporte de la consultora.
De acuerdo con la prospectiva de Stratfor, una ruptura del Cártel del Golfo abre la posibilidad de que Los Zetas (con quien están enfrentados) e incluso el Cártel de Sinaloa, busquen ganar territorio, lo que incrementaría la violencia en el Noreste de México.
"Las consecuencias de la ruptura dentro del Cártel del Golfo incluirían probablemente jugadas de Los Zetas y (del Cártel) de Sinaloa para tomar ventaja de la situación y arrebatar territorio. Al mismo tiempo esto incrementaría la violencia todavía más allá de las ya condiciones volátiles creadas por la batalla de tres frentes entre Los Zetas, el Cártel del Golfo y las fuerzas del Gobierno por el control del Noreste de México", concluye el reporte.
De manera general, el reporte de Stratfor asegura que las tendencias actuales al interior de los cárteles del narcotráfico en México tienden hacia la polarización de dos grandes bloques liderados por los cárteles más fuertes; el Cártel de Sinaloa y por otro por la organización de Los Zetas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario